Trisquel, de Enkaru

Cuervo Gris es el druida más famoso de todos los tiempos, capaz de controlar los cuatro elementos de la naturaleza a su antojo. Serio, responsable, poderoso y apuesto, este humano rivaliza con las razas más poderosas en la magia. Y está buscando un discípulo al que transmitirle todo ese poder. El elegido será, sorprendentemente, Heian Balderk, un elfo mujeriego, despistado, irrespetuoso, impaciente y pervertido.
Juntos recorren el mundo en busca de entrenamiento para Heian, cuando llega a sus oídos la noticia de un secuestro: una joven y bella elfa ha sido secuestrada y posiblemente sea sacrificada. La elfa en cuestión resulta ser Kayli Slevin, una chica orgullosa y prepotente, algo manipuladora y enamoradiza, a la que ambos, Cuervo Gris y Heian, rescatan de sus captores.

Enkaru nos presenta Trisquel, una historia plagada de aventuras desde el primer capitulo hasta el último, con muchísimo humor y tetas, muchas tetas. En primer momento se nos presenta a Heian, un elfo al que le pierden las mujeres, el cual ha sido elegido para ser el aprendiz del famoso y respetadísimo druida Cuervo Gris. Cuando escuchan que hay una joven damisela en apuros, corren a socorrerla, apareciendo la tercera protagonista de este curioso y divertidísimo trio: Kayli. Desde ahí empieza una historia llena de antagonistas (un tanto ineptos, lo que le da más humor a la historia) y unos secundarios que, aunque no queda muy claro el porqué de su presencia en un principio, ayudan a que los protagonistas sigan metidos en diferentes líos. Y todo por la búsqueda de un objeto en particular: el Trisquel.

Uno de los puntos frágiles que tiene la historia, es que la acción no para, es continua, lo cual deja pocos respiros al lector, aunque esto tiene también un lado bueno: nunca te aburres. La trama es rápida y llena de acontecimientos entrelazados que consiguen crear una disparatada aventura. 

Los personajes están muy bien diferenciados tanto en dibujo como en carácter, los tres con comportamientos y caracteres muy bien definidos y totalmente contrarios, lo que hace que en más de una ocasión los trs acaben chocando entre sí. Aunque el desarrollo de los tres es un poco lento (hay que esperar al resto de la historia para ver cómo siguen evolucionando) sí que puedeempezar a verse un cambio en el comportamiento de Kayli con respecto a los dos protagonistas, lo cual acaba por dejarnos con la duda de cómo acabará la historia. Los personajes son tremendamente entrañables, lo que hace que de un modo u otro acabes cogiéndoles cariño.

En cuanto al estilo de Enkaru, aunque aún está en evolución, es un estilo muy personal y muy expresivo que ha conseguido darle a cada personaje un toque de distinción para hacerlos diferenciables entre sí. Quizá en ocasiones parece hacer uso con demasiada frecuencia de expresiones exageradas para dar más énfasis a las bromas o a las situaciones comprometidas, pero tampoco es algo que se haga muy pesado.

En definitiva Trisquel es una historia que os hará pasar unas risas y os adentrará en una aventura que no os dejará indiferentes. Estamos esperando con ganas que salga un nuevo tomo para ver cómo continua la búsqueda de este objeto tan codiciado.